jueves, septiembre 09, 2010


Se respira el vacío de tu ausencia

he tratado de fingir que no duele

pero después de tí, trastocada el alma

se siente perdida, llana, vilipediada;

confundida, rota y olvidada.


Sueño que me amas, imagino tu cuerpo al lado

pero al despertar descubro otra noche

perdida entre las sábanas sin nombre,

en besos sin elixir y en caricias que no sienten.

Me borro la útopia de tu regreso,

quedan regados los pecios del alma

y los vuelvo a guardar en la botella vacía

junto a la copa rota de este amor sin lecho.